El Padre Nuestro
Padre nuestro que estás en el cielo,
santificado sea tu Nombre,
venga tu reino,
hágase tu voluntad, en la tierra como en el cielo.
Danos hoy nuestro pan de cada día.
Perdona nuestras ofensas,
como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden.
No nos dejes caer en tentación y líbranos del mal.
Porque tuyo es el reino, tuyo es el poder,
y tuya es la gloria, ahora y por siempre. Amén
Confesión
Dios de misericordia,
confesamos que hemos pecado contra ti
por pensamiento, palabra y obra,
por lo que hemos hecho
y lo que hemos dejado de hacer.
No te hemos amado con todo el corazón;
no hemos amado a nuestro prójimo
como a nosotros mismos.
Sincera y humildemente nos arrepentimos.
Por amor de tu Hijo Jesucristo,
ten piedad de nosotros y perdónanos;
así tu voluntad será nuestra alegría
y andaremos por tus caminos,
para gloria de tu Nombre. Amén.
Oración por Pureza
Dios omnipotente,
para quien todos los corazones están manifiestos,
todos los deseos conocidos
y ningún secreto encubierto:
Purifica los pensamientos de nuestros corazones
por la inspiración de tu Santo Espíritu,
para que perfectamente te amemos
y dignamente celebremos tu Santo Nombre;
por Cristo nuestro Señor. Amén
Oración de Envío
Omnipotente y eterno Dios,
te damos gracias porque nos has nutrido
con el alimento espiritual
del preciosísimo Cuerpo y Sangre
de tu Hijo, nuestro Salvador Jesucristo;
y porque nos aseguras, en estos santos misterios,
que somos miembros vivos del Cuerpo de tu Hijo
y herederos de tu reino eterno.
Y ahora, Padre, envíanos al mundo
para cumplir la misión que tú nos has encomendado,
para amarte y servirte
como fieles testigos de Cristo nuestro Señor.
A él, a ti y al Espíritu Santo,
sea todo honor y gloria, ahora y por siempre. Amén.